Límites en familia

Límites en familia: ¿es normal sentirse así?

Las relaciones en la familia

El ser humano es un ser social que pertenece a grupos. En estos grupos, explora, se relaciona, busca su identidad y genera vínculos significativos que le permiten construir una idea sobre:

  • el mundo
  • los demás
  • sí mismo/a

Uno de estos grupos y, de especial relevancia, es la familia. Este grupo, a diferencia de otros, tiene la peculiaridad de que cuando nacemos pertenecemos a él y, normalmente, somos integrados a ese entorno con ciertas expectativas sobre nosotros y con un sentimiento que ya ha comenzado a elaborarse antes de conocernos.

Cada familia tiene su propio lenguaje, un rol y su propia forma de relacionarse, crea todo un sistema. Es por esto por lo que ya podemos ir anticipando que, cuando un miembro de la familia detecta algo que cree que puede estar ocasionando problemas en esa dinámica de la familia, no siempre resulta fácil o cómodo poder expresarlo, ya que cada familia puede responder de una forma muy distinta al mismo asunto.

Los límites

Existen distintos tipos de límites, no todos son iguales y esto, tiene mucho sentido ya que:

  • no todas las situaciones son iguales: por ejemplo, es esperable tener conflictos en familia pero no será igual la manera en la que se resuelvan o en la que los miembros de esta respondan lo ocurrido.
  • no todas las personas traspasan nuestros derechos de la misma manera
  • no todas las relaciones responden igual a nuestros límites

Existen límites externos (hacia fuera, por ejemplo, lo que digo al otro) pero también límites internos (por ejemplo, cuando tomo en cuenta lo que estoy necesitando y no lo dejo sin considerar). Por esto, resultará muy importante saber qué tipo de límites necesito en cada situación.

Cuando la familia no responde a los límites

Sin embargo, aunque pueden existir ocasiones o familias que acojan bien los límites del otro, puede pasar que esto no siempre sea así y que existan personas que no respondan a los límites que tratas de poner e intenten pasar por encima de ellos.

En estos puntos, es crucial tomar consciencia e identificar qué es lo que está ocurriendo, ya que puede resultar muy frustrante para la persona e, incluso, aparecer emociones relacionadas con la culpa al tratar de ponerlos en marcha.

Aquí será de vital importancia distinguir entre:

  • hay un conflicto concreto que requiere de ayuda profesional a nivel familiar para resolverlo
  • la relación en la familia requiere de un proceso especializado para ayudarlo
  • alguien de mi familia no cambia, no respeta mis límites y genera dolor

Terapia psicológica en Madrid

La terapia psicológica, por tanto, estará orientada de forma distinta según lo que esté ocurriendo, ¿de qué modo?

Cuando un asunto es posible resolverlo en familia porque las partes están dispuestas y pueden generar cambios, entonces será interesante realizar una terapia de familia. Sin embargo, cuando es uno de los miembros el que está sufriendo por algún asunto familiar y la otra persona no está dispuesta a generar cambios, entonces estaremos orientados hacia una terapia psicológica individual para analizar qué puede estar ocurriendo y explorar, una vez identificado esto, qué decisión tomar y cómo gestionar la situación con las posibilidades que existen.

Desde Psicalma contamos con profesionales especializados en Madrid para ayudaros en los distintos procesos de terapia, con terapia familiar, de pareja y/o individual en modalidad online y presencial.

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