SEÑALES PARA IDENTIFICAR DINÁMICAS TÓXICAS EN UNA RELACIÓN
La Psicología expone que las personas somos seres sociales interdependientes, esto implica la necesidad de establecer vínculos seguros en nuestras relaciones con los demás a través de las emociones, especialmente a través del amor. A través de estas relaciones, uno puede sentirse validado y merecedor de amor, en definitiva, aceptado por el otro.
Sin embargo, cuando una relación empieza a encontrarse rodeada de conflictos, la persona puede verse en una situación de crisis psicológica por el impacto que esto genera en sí misma.
Las relaciones tóxicas de pareja son entendidas como una problemática donde los integrantes de la relación permanecen la mayor parte del tiempo (o en ciclos más breves pero muy intensos) con sentimientos de malestar en sus interacciones y experiencias. Esto afecta a la estabilidad emocional de cada uno y causa graves consecuencias psicológicas (por ejemplo, a la imagen que uno percibe de sí mismo).
Algunos factores psicológicos comunes que aparecen son los siguientes:
- Dificultades para solucionar conflictos
- Falta de comunicación asertiva
- Celos: es importante tener en cuenta que no existen personas celosas, ya que los celos son una emoción, no un rasgo de personalidad, por lo que hay que entender los celos como una emoción que está siendo adaptativa o desadaptativa (no es útil, viene acompañada de problemas, aparece con una frecuencia e intensidad muy elevada… etc).
- Infidelidades
- Discusiones por necesidad del vínculo: la pareja ha de ser consciente de qué tipo de apego ponen en marcha en sus relaciones y cuál han construido en la pareja
Algunas razones por las que pueden establecerse dinámicas o relaciones tóxicas:
- Mitos románticos: se llega a justificar el sufrimiento afectivo y los daños que esto conlleva <<quien te quiere te hará sufrir>>
- Falta de responsabilidad afectiva: por ejemplo, cuando no se respetan las emociones del otro o solo un miembro de la pareja trabaja en la relación
- Dificultad para comunicarse y entender a la otra persona: las discusiones son más una “guerra” por alcanzar la razón que por entender cómo la otra persona se ha llegado a sentir de ese modo
- No hay límites y espacios propios: esto se caracteriza por la fusión de la pareja en la que no existe un espacio personal propio (por ejemplo tener salidas o hobbies que se disfruten por separado) así como la ausencia de reglas sobre qué limites pueden o no cruzarse (relacionado con los mitos <<por el amor todo vale>> o << la media naranja donde juntos somos uno>>)
Respecto a un plano cognitivo (esquemas cognitivos: estructuras que definen cómo pensamos) y conductual (cómo nos comportamos):
- La persona se ve a sí misma como inferior
- Dependencia emocional: es importante recordar que las personas no somos dependientes ni independientes sino interdependientes de los otros
- Autoestima afectada negativamente
- Estilo de apego no seguro: lo que espero del otro y del mundo es algo inseguro y del que vendrán problemas y sufrimiento
- Errores en el pensamiento: lo que en Psicología se llama distorsiones cognitivas
- Idealización de la otra persona
- Anteponer las necesidades del otro antes que las propias: esto se relaciona con conductas de sumisión, especialmente en personas educadas a ser más sensibles a las emociones de los otros
- Ambivalencia en las muestras de afecto o interés
Detrás de una relación tóxica hay una serie de factores que están sosteniendo esas dinámicas que son capaces de aceptar e incluso justificar ese malestar y del que puede ser difícil salir. La terapia psicológica permite reestructurar y desaprender aquellos aprendizajes y procesos que se han establecido y que tanto daño pueden estar ocasionando.