Aspectos importantes en las relaciones
Si nos paramos a pensarlo, estamos continuamente generando relaciones con aquello que nos rodea y, también, con nosotr@s mism@s.
Tenemos relaciones en el trabajo, con nuestras amistades, familia y pareja. Además, también establecemos relaciones con la comida, con el dinero, con el trabajo que desempeñamos y, por supuesto, la propia relación con un@ mism@.
Cuando nos encontramos en una relación, del tipo que sea, podremos observar que, aunque no todas son iguales porque conectan con distintas partes de nosotros, sí podemos identificar qué costes y beneficios estamos teniendo y qué implica eso internamente.
Es decir, yo podré tener, por ejemplo, un coste de solo mantener relaciones sexuales con una persona (en una relación cerrada de pareja) pero, quizás, ese coste es mucho menor que los beneficios que encuentres en tu relación y eso hace que puedas asumir ese “coste”.
Sin embargo, no todos los costes y beneficios son iguales, ni nos conectan de la misma manera.
Qué es buen trato y qué es el mal trato
Si dividimos entre buen trato y mal trato, esto ya es un indicador claro de que no existe un término medio entre ambos, estarás en un tipo de relación o en el otro.
Hay muchas claves importantes para distinguir relaciones abusivas de las que no lo son, una de ellas es el ejercer poder y control sobre la otra parte, generando un daño:
- Emocional: sensación frecuente de culpa, de abandono, rechazo o insuficiencia (“no soy suficiente”), entre otras.
- Físico: agresiones y/o amenazas de violencia, en estas también se incluye la violencia ambiental: es decir, golpear a algo del entorno en lugar de a ti.
- Psicológico: control, negar lo que sí ha ocurrido, manipulación, entre otras.
- Financiero: desde ejercer control en el control financiero, como impedir la independencia económica, por ejemplo.
- Social: una manera de generar control y poder social es condicionando tus relaciones sociales, tus salidas, así como tu imagen ante los demás (por ejemplo, comentándote “lo mal que quedas” cuando hablas con otras personas o cuando se crea una imagen rechazable y manipulada de ti tras una ruptura).
Señales de que puedes estar en una relación de abuso
Aunque es importante poder estar acompañad@ de profesionales para identificar con claridad lo que está ocurriendo, aquí enumeramos algunas de estas señales:
- Aislamiento de amistades y/o familia
- Cambios en la autoestima
- Aparición frecuente de ansiedad
- Estado de tensión constante o con cierta frecuencia
- Sensación de confusión sobre “lo que ha pasado”
- Escaso reconocimiento sobre lo que sientes, como si eso no fuera posible o no fuese válido
- Mensajes de “estar loc@”
Consecuencias
Estar en una relación abusiva genera muchos daños tanto en la propia relación como en la persona, ya que es una experiencia traumática que puede dañar considerablemente.
Algunas de estas consecuencias son:
- Estado de alerta constante, manifestándose a través de insomnio, palpitaciones y dificultad para mantenerse en un estado de calma.
- Creación de una imagen negativa: es probable que en la relación la persona abusadora haya acusado a la persona abusada de ser “la culpable” de lo que pasaba y la “generadora de malestar”. Esto genera una herida profunda de que hay algo malo en ella y de que no es suficiente.
- Problemas de identidad.
- Dificultad para tomar decisiones.
- Aislamiento social y miedo a las relaciones.
Terapia psicológica en Madrid
Continuando con lo anterior, las consecuencias de las relaciones de maltrato son diversas y, sobre todo, especialmente dolorosas. Sin embargo, identificar algunas señales y/o salir de estas relaciones son el primer paso para generar un punto de inflexión importante y situarse en un lugar distinto. Es estar más cerca de poder reparar las heridas y vivir de una forma distinta.
Desde Psicalma contamos con profesionales especializados, destacando su calidad humana y profesional para acompañar en cada proceso.