Celos entre hermanos

La familia y los celos entre hermanos

¿Qué son los celos?

Los celos son una emoción o un estado afectivo que se caracteriza por el miedo o la percepción de ver disminuida la atención y/o afecto de una persona apreciada. En ocasiones, cuando esta emoción se presenta de una forma inadecuada (demasiado frecuente, intensa o duradera), suelen aparecer asociadas otras emociones como la rivalidad, el resentimiento o el rechazo, entre otras.

Cuando esta emoción aparece de forma puntual en situaciones con las que esta emoción es congruente, estará cumpliendo su función, al igual que cuando emergen el resto de las emociones y no ha de significar un problema necesariamente. Sin embargo, será importante intervenir cuando esta emoción ya no esté siendo adecuada para la persona, generándole un malestar significativo y dificultándole en algún aspecto de su vida.

La llegada de un hermano

La llegada de un hermano menor a la familia es un cambio para toda la familia. Esta llegada va a suponer algunas modificaciones en las dinámicas que hasta ahora se estaban dando en el hogar, como, por ejemplo, una menor disponibilidad de tiempo y de atención: ahora ya no estarán disponibles sólo para un hijo/a, si no que estarán repartidos con una nueva persona.

Por esto, es importante preparar la llegada de este hermano. A continuación, señalamos algunas pautas clave:

  • Hablar de vez en cuando sobre el tema en casa con naturalidad.
  • Generar acercamientos previos al nacimiento: por ejemplo, acariciándole la tripa a mamá o preparando el nuevo cuarto. Si el niño/a se niega, es importante no obligarle a hacerlo.
  • Escuchar y preguntarle acerca de sus inquietudes o emociones en cuanto a la llegada sin juzgarle.

¿Cómo se pueden manifestar los celos?

Cuando aparecen los celos de una forma que generan un malestar desbordante, exagerado, pueden estar apareciendo algunas manifestaciones como:

  • Síntomas de ansiedad: tensión muscular o dolor de estómago, por ejemplo.
  • Dificultad para concentrarse en actividades que requieren atención.
  • Rechazo hacia algún miembro de la familia.

¿Cómo podemos ayudar a reducir los celos?

Cuando los celos están interfiriendo en la vida del menor, normalmente acaba afectando también al resto de los familiares, viviendo momentos o estados que les hacen pasarlo mal, no sabiendo cómo gestionar estos conflictos y modificar la situación actual.

Cada caso es único, por lo que cada familia tiene vivencias que son distintas a las de otras, pero sí podemos encontrar algunas pautas que son útiles en estas circunstancias que habrán de ser adaptadas individualmente:

  • Ceder un espacio al menor para que exprese cómo se siente: “Veo que esta situación está siendo difícil para ti ¿quieres que hoy pasemos un rato tú y yo juntos?”.
  • No comparar a los hermanos entre ellos: Evitar frases como “aprende de tu hermano, mira él qué bien se porta”. En lugar de esto ayúdale con la conducta que quieras conseguir: “Noto que estás muy nervioso ¿necesitas ayuda?
  • Habla sobre sus emociones: Creo que en este momento te estás sintiendo enfadado ¿es así?

Psicólogos especializados en familia e infanto-juvenil

Como referíamos con anterioridad, cada caso es único y distinto, por lo que desde Psicalma te invitamos a que trates de adaptar estas claves para ti. Sabemos que son situaciones complicadas y que puede ser necesario contar con la ayuda de un profesional para poder gestionar adecuadamente esta situación y que tanto los menores como la familia puedan tener un bienestar mayor, interviniendo, sabiendo lo que hacemos y el por qué lo hacemos. Si crees que necesitas nuestra ayuda, en Psicalma contamos con profesionales especializados en infanto-juvenil y familia para poder acompañaros en este proceso.

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